Imagine poder combinar los vehículos compartidos, el transporte público, las bicicletas compartidas y otros servicios de movilidad compartida en una única oferta que permita planificar, comprar y viajar de forma sencilla utilizando el trayecto y el vehículo más adecuados para su desplazamiento.
Creemos que la movilidad como servicio supondrá una alternativa real a los desplazamientos en vehículo privado y, a la larga, a la necesidad de poseer un automóvil, dado que permite un desplazamiento sencillo y sin incidencias de puerta a puerta. Esta visión ha dejado de ser una quimera y ya existen pasos que podemos dar para avanzar hacia esa realidad.
La movilidad como servicio (o MaaS, por sus siglas en inglés) consiste en poder utilizar cualquier servicio de movilidad para un trayecto (ya sea público o privado) desde que sale de su casa hasta que llega a su destino, con un proceso de planificación y pago sencillo en función de qué medio utilice y cuánto lo utilice.
La movilidad como servicio podría representar la oportunidad más interesante que los organismos de transporte han tenido a su alcance en décadas e implantará un nuevo modelo de movilidad en el que los ciudadanos ya no necesiten comprar o utilizar un vehículo privado, y en el que los organismos de transporte sean el eje vertebrador de los ecosistemas MaaS grandes y pequeños en todo el mundo. Así se garantiza la equidad en el acceso al transporte y contribuye a conseguir los objetivos sociales y medioambientales.
La movilidad como servicio (MaaS) ofrece una experiencia de pasajero fluida gracias al uso de múltiples medios de transporte, desde el comienzo hasta el final del viaje.
Si los ciudadanos reducen su uso de vehículos privados en favor de otras opciones de movilidad compartida, el número de automóviles en las carreteras. Por tanto, el tráfico, también se verá reducido.
La incentivación y optimización del uso de servicios de movilidad compartida en una ciudad sirve para reducir el número de vehículos en las calles y, en consecuencia, el nivel de contaminación.
Los ciudadanos ya no necesitarán ser propietarios de un vehículo. A cambio, pagarán por sus desplazamientos a medida que los utilicen y cuando los utilicen, en función de su consumo.
La movilidad como servicio supone la promesa de mejorar la manera en la que los pasajeros «consumen» servicios de transporte. El concepto engloba la planificación de trayectos, la venta de billetes y el pago para todos los medios y servicios de transporte. Esta idea elimina obstáculos entre medios de transporte, operadores, sistemas de billetes y de pagos y los aúna todos bajo un único servicio que ofrece desplazamientos cómodos y fluidos a todos los pasajeros.
Este sería un ejemplo. En el futuro, tal y como los conciben los proveedores de MaaS, podremos acceder a cualquier medio de transporte, ya sea público o privado, a través de un único servicio de pago y de una única aplicación. Ese servicio planificará el trayecto óptimo teniendo en cuenta todos los medios de transporte —desde trenes a vehículos autónomos— para ofrecernos el mejor desplazamiento posible.
Desde que anunciamos el lanzamiento del SDK Justride para billetes de móvil, el nivel de interés y entusiasmo del sector ha sido considerable, tanto por parte de organismos de transporte como de otras compañías que forman parte del ecosistema de movilidad urbana más amplio.
Hasta la fecha, ya hemos anunciado asociaciones SDK con Uber hemos establecido una colaboración sin precedentes entre vehículos compartidos y los billetes de transporte públicos, con la aplicación Transit, que millones de usuarios utilizan para planear viajes y obtener información en tiempo real, y con Chalo, el proveedor líder de servicios de planificación de trayectos en la India.